A quién corresponda


Mafalda me emociona de manera particular, Somos de la misma generación, tampoco me gustaba la sopa, de niña: mi madre me dibujaba en hojas de garbanzo, sus caras frente al plato de aquel brebaje "fatal" y las colgaba en las paredes de mi dormitorio.
Como la vida misma, releer Mafalda en diferentes etapas de mi vida me ha dado la posibilidad de profundizar en mis emociones.
Esta ilustración me trae también recuerdos de algunos momentos de mi vida en los que sentí que esa actitud es la más beneficiosa para mí y mi entorno.
Hoy he decidido empezar a compartir este espacio, tomar las manos de mi personaje y moverlas lentamente, apoyarlas en las piernas, dibujar una sonrisa, despejar la mente y abrir mi corazón.
Cuando esto pasa siento que me aparecen algunas expectativas. Poder aportar algo de mi camino recorrido para que las personas que accedan a lo que comparto encuentren algo significativo. Exteriorizar mi pensamiento: convertirme en un canal más... Entonces recuerdo, respiro profundo, siento las expectativas, vuelvo a respirar y las veo pasar, amontonadas en un carrito de cuatros ruedas que mi personaje se lleva y hago consciencia que el resultado de lo que hago no me pertenece y por lo tanto nada espero, no pongo esperanza, Solamente dejo ir lo que hay en mí que pueda resonar en quién se lo encuentre por el camino.



Alicia García Leites
DEmCo

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